con aquella locura armoniosa de antaño?
Ésos no ven la obra profunda de la hora,
la labor del minuto y el prodigio del año.
Yo, pobre árbol, produje, al amor de la brisa,
cuando empecé a crecer, un vago y dulce son.
Pasó ya el tiempo de la juvenil sonrisa:
¡dejad al huracán mover mi corazón!
AUTOR: Félix Rubén García Sarmiento, conocido como Rubén Darío, fue un poeta nicaragüense, máximo representante del modernismo literario en lengua española. Es posiblemente el poeta que ha tenido una mayor y más duradera influencia en la poesía del siglo XX en el ámbito hispánico. Es llamado príncipe de las letras castellanas.
COMENTARIO: El poema habla de que las personas no se dan cuenta de que es otoño y que el tiempo está transcurriendo. El autor, que dice ser un árbol, ha crecido y ahora sufre una corriente de aire que dificulta su existencia como consecuencia de las condiciones atmosféricas de esta época del año.
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